viernes, octubre 31, 2008

A titulo informativo: JOEL PETER WITKIN


"Mas tarde, cuando ya era un adolescente, mi abuela tuvo un accidente y su pierna se empezo a gangrenar. Cuando me levantaba la casa se llenaba con ese olor a cafe y la pierna de mi abuela, y acabe asociando el dolor con el amor."

"Pienso que lo que hace que una imagen sea poderosa, es que a diferencia de otros medios, como el vídeo o el cine, aquí se trata de la quietud. Pienso que alguien que se hace fotógrafo es porque quieren absorberlo todo y comprimirlo a que quede en una imagen fija. Cuando realmente quieres decirle algo a alguien, los agarras, los tomas y abrazas. Eso es lo que ocurre con la imagen fija."

viernes, octubre 24, 2008

30 milimetros en 10 segundos
Tras haber conseguido el aval poético me zambullo en los profundos vericuetos de la mente misma del individuo en cuestión. En un primer instante, es la piel erguida en cristales la que te recorta en contorno del material amniótico, la síntesis de una traslación aceitosa, las burbujas efervescentes. Soy: esto que escucha una extraña melodía, acompasada, resultante de lo remanente de un zapping insomne, tal vez, unos armónicos agudos de la inquilina renga del séptimo superpuesto a un jinggle radial de un novedoso talco pedico. Soy: un mareo de miopía, tengo un lampazo en la mano, una botella de coca con el cuello cortado recargada de detergente diluido. Soy un color fucsia forrando para el lado de adentro, las paredes que atrincheran lo que suponemos ideas flotando detrás de los velos: un grussian blur de veinte pixeles aproximados en todo lo que veo.
En la acción sistemática me reconozco como ente a gremio afiliado, sin ser capaz de recordar el significado de derroche, de bobera alguna que me debería dar por efecto el gesto de estar baldeando la vereda instantes después de acontecido el diluvio.
Treinta milímetros en diez segundos.
No pienso en nada y respondo al “buenos días”.
De una vena del edificio, voy llenando otro balde.

miércoles, octubre 22, 2008

Bromas Saladas

martes, octubre 21, 2008

Mar dice:
en el estilo
Mar dice:
él quiere ser proust

jueves, octubre 16, 2008

El resultado de las placas de rayos X


Darte cuenta 
que desde hace 3 cuadras (aprox.)
venis tarareando bajito
"eres...la chica de mi sueños"

miércoles, octubre 15, 2008

Miercoles y perisanas cerradas desde el domingo

Pensaba en una chica que nunca me quiso. Escribir una primera novela, que sea un caballo de Troya. Un dolor correctamente patentado en oraciones largas e ilegibles, no persiguiendo el fin, de joder literalmente al lector, pero. Un salvavidas valido para el río arremolinado de barro, de hojas secas partidas a su vez en infinitas hojas secas, del futuro cosmopolita que te espera paciente, socavando en similares proporciones el cine y los vernissages de sonrisas fervientes.
Es Miércoles, llueve desde la mañana y esa chica de pómulos hundidos, flaca y blanca se me vino, otra vez a la cabeza. Se cruza entre las líneas de Focault, que pasaba casual me dice, para minutos después chapotear imprudente en los escritos de Barthes. Recuerdo haberme enterado que se hizo lesbiana.
La imposibilidad de la lectura, el grado cero de lo otro, pénduleo entre la cocina y los olores de la pieza que me son ajenos. En el trazo, los pasos convencidos de que la fuerza de rozamiento tiene la capacidad de gastar la idea de ella. La física inoperante del cuerpo identifica el problema y lo subraya de rojo, ahora soy como Mc Giber. Tengo un encendedor en la mano. Lo prendo, se apaga, lo prendo se apaga. Camino mientras el ruido de las chispas.
Una revista de baño, ADN cultura, donde en la tapa el artista de la polémica, Damien Hirst, cuenta como hizo su plata. Hace latitas rellenas de cosas, que alguna vez hicieron latitas rellenas de cosas. Hete aquí la cuestión del shok: podría pensar que ese tiburón gigante estuvo alguna vez vivo y se lijo en una paciencia enorme la perfecta geometría de sus dientes, podría, pero me entere que no, que sigue igual, pómulos hundidos, flaca, blanca y sin ganas de quererme.

miércoles, octubre 08, 2008

Yom Kippur para principiantes

En resumidas cuentas nos inventamos una divinidad burócrata, que determinado día, regido a tal fecha de tal mes, se calza un smoking y con una parsimonia de notario abre sus libros mientras se acomoda esa temporal pseudo humanidad haciendo chirriar la cuerina del sillón.
Un libro es el contable donde los pecados y las buenas acciones se alternan entre las columnas del debe y el haber.
De ser positivo el balance, el proceso continua en el otro libro, el libro de la vida, donde solo deben figurar aquellos a los cuales se les renueva el contrato.
La treta: el único recurso del solicitante es el orar, parece ser.
Escuche de alguien una vez, que de paranoico pensó que no llegaba a los positivos y quiso meter coima al notario, y no solo que esta no fue aceptada, sino que inmediatamente se le sumo el acto a la columna del debe, perdiendo en el global por un punto bajo el cero. Una pena, eh.
Nunca supe mas de el.

miércoles, octubre 01, 2008

Aproximacion, donde un sueño hace pie


Rebotas en el ancho del pasillo.
Tres y cuarto.
Los 50w te astillan los ojos.
Entre paredes gestas una estupidez biológica.
Tenes la boca seca y una tela de araña.
Tenes una pantufla y una piel que se desprende en ese paso.
Las persianas a medio camino, tenes.
Un traveling que arranca en dos tomates.
Un traveling que concluye en un sachet acorazado, pasa de uva.
Tu compañero de vivienda te intercepta en el living.
Los ojos salidos tiene.
Es preocupante – dice – hay muchas moscas moribundas.
La sutilidad se engendra entre su dedo índice y su anular.
La mosca moribunda intacta.
Parpadea.
Son tres y cuarto.
El silencio es el último agite que se suspende.
Te volves en un paneo.
Las moscas moribundas yacen catalogadas equidistantes sobre la mesa.
(a simple vista, calculas, habrá unas miles).
Equidistantes, agonizando en el lugar, haciendo palmas contra el durlock.
Te volves a mirar.
Los ojos cada vez mas afuera.
Entendes.
No.
Ves las infinitas subdivisiones.
La aguja en el ojal.
Crees entender, “hay muchas moscas moribundas, si”.
Sopor, ondulan las sabanas, es la reina madre.
Te llama en ese justo portazo.
Es la vuelta a la penumbra.
A unos ojos desconocidos que iluminan la proyección tenue, luz de heladera.
Las venas se hinchan como piernas minúsculas.
En tu sueño consecuente, ganas una especie de duelo.
Ves claro el brillo, manchando una mano.
Ves las palmas, los ojos, los ojos, las venas.
La conciencia que te susurra, ves.
Labios de un loop húmedo, aceitado.
No podes dormir fotolog.
Moscas.
Tres y cuarto.