jueves, junio 28, 2007

Emepetrera selectiva indicadora de tendencia


A priori pareciera ser una emepetrera común y corriente. El usuario carga sus temas y sale a andar por la vida. Pero si observamos en detalle, veremos la gran diferencia que tiene este nuevo modelo, que propongo que se invente.

La emepetrera selectiva indicadora de tendencia es un buscador de factores en común. Su sistema electrónico de Comunicación de radiofrecuencia esta preparado para emitir y recibir señales a una frecuencia de 10 Mhz a una potencia de 1 W (Para evitar posibles interferencias que se dan en la via publica). Con dicha potencia, el aparato cubre un radio de 20 mts a la redonda.

El usuario “A” recibirá un alerta sonoro acompañado de el titilar de un led, cuando alguna persona del entorno (usuario “B”), que disponga del mismo modelo de emepetrera (con capacidad de emitir y recibir información vía RF) se encuentre presente en ese radio de 20 mts y este escuchando el mismo tema en ese mismo momento que nuestro usuario “A”.

Este aparato funciona entonces como un mecanismo de advertencia a una no vislumbrada coincidencia o mejor dicho, arrimando casualidades y subrayándolas como posibles puntos de contacto entre personas.

Hace unos días leía en un libro “error humano” de Chuck Palahnuk: “ Si me dedico a escribir es por sobre todo, porque una vez a la semana la escritura me permitía reunirme con otra gente”. Es la intro de una serie de relatos sobre personas que comparten algo en común (el “algo” podría ser resumido a un lenguaje) y es ahí donde todos los relatos confluyen, porque en ese punto en común, los personajes parecen encontrar su razón de ser, el goce. Luego concluye con algo bastante obvio y empíricamente comprobado: “Por entonces la mayoría de mis amistades se basaban en la proximidad, eran vecinos o compañeros de trabajo. Esa gente que uno conoce porque bueno, le toca sentarse con ellos todos los días.”

Tampoco podría dejar de citar, la medula de este invento, el texto que motivo la necesidad, el rayuela de Cortazar. Donde la maga y Oliveira, dos que parecen hechos tal para cual (o así por lo menos lo pienso yo, que siento identificado en Oliveira a mi mismo ser y tanto en la maga como Talita mis dualidad de encastre optimo femenino), que yirando aleatoriamente por las calles parisinas juegan al inverso, a chequear si el destino aprueba un preexistente relación.

Por otro lado, el hecho del que punto de contacto sea la música es algo arbitrario. Dado el avance de la microelectrónica, los dispositivos de radiofrecuencia, podrán ser incrustados en los libros, o en las capas superiores de los DVD.

Otra cosa configurable por el usuario es el grado de selectividad que este desea. Para el caso de la música, por ejemplo, este puede preferir que su dispositivo se active en el caso de coincidir en un álbum, en vez de restringir la coincidencia a un mismo tema (cuestión que incrementa su margen de coincidencia a costa del deterioro del concepto por el cual se hizo el dispositivo).

También habría que prever otro tipo de usos que se le pueda llegar a dar a este artefacto (ya sea para el lado del bien o del mal), ya que, si alguien se empeña en captar las ondas que andan dando vuelta por ejemplo, por una cuadra de la calle florida, podrá tener un índice de tendencias (o estudio de mercado) de lo que la gente consume musicalmente en ese momento.


Que les parece? Soy Philip K. Dick?

7 comentarios:

Anónimo dijo...

ja
pulgar arriba
esto va pa la revista pote
abrazo


pedro

Anónimo dijo...

totalmente hacible, no?
una repuesta posmoderna a un problema posmoderno y sí...

yo los pondría también en envoltorio de galletitas,mate..
un paso más es incrustar el artefacto en la masa encefálica, y ahí..
tnt.

la Dama sol dijo...

No,
yo creo que sos un personaje de Roberto Arlt.

jajajajajaja

:)

te gusta cortazar pero sos un personaje de arlt, me parece

paradógico y reallllll

hermoso blog, lleno de contundencias.
gracias por pasar por el mío!!!!!

le mando un picotazo enorme

gaviota.

Oli dijo...

sisi concuerdo con dama sol me gusta

Anónimo dijo...

Creo que los chinos o los japoneses tenían algo así pero con celulares, a los que les cargaban un perfil y sonaban o algo cuando había coincidencia, como un roberto Galán posmoderno.
Personalmente, compraría si fuera para tapas de libros, es como más romanticón.

Anónimo dijo...

si el ingeniero manrique es de verdad ingeniero

LECTURA INVERSA: dijo...

hola..qué tal?


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